Y a pesar de que me torturaron las orejas con Fidel Nadal ¡Por dos horas enteras! no me levanté.
Claro, pude hacer el trabajo, pero estoy arrepentida de haber maltratado a mi ya muy maltratado cerebro.
Llegué a casa y puse Metallica al taco, para compensar.
¿Y Metallica ayudó?
ResponderEliminarSerá Metalica el opio de los que tenemos nobúc?
ResponderEliminar¿Quién lo sabrá?